A veces me molesta el caparazon y siempre llego a la deshora que me marca el corazon....
Me dices que me parezco a los caracoles
me sobra techo, me muero en soles,
tras espesura del chaparrón
será que el camino bueno se ha vuelto malo
o que no quiero pegar ni un palo,
que solo quiero escuchar tu voz.
que siempre llego a la deshora que marca el corazón
y que, cuando estamos a solas, molesta el caparazón.
me dicen que tus braguitas revolotean
que lo hacen sólo pa que las vea
que llevan alas de desamor,
será que las ensuciamos tan malamente
que los colchones son mala gente,
que siempre quieren tener razón
que siempre llego a la deshora que marca el corazón
y que, cuando estamos a solas, molesta el caparazón.
mi casa está donde estás tú
los mismos ojos, la misma luz
mi casa está donde estás tú
los mismos clavos, la misma cruz
los mismos clavos, el mismo ataúd.
Quien?, Quien te colgo el mar de las pestañas?...
Cuéntame, dime, ¿Quién te ha colgado el mar de las pestañas?
Y ahora dársena de estiercol se tornó la comisura de los besos.
Sed de limón, cimbrear como las espadañas
y en el hueco de mi espalda y la pared cuelga tu nido del revés.
Y cada huevo parido es nada y cada beso en la boca es nada.
Como si no hubiera pasado nada#
Un reguero de luna será nuestra casa,
de esta luna tan puta de pechos de plata.
Será el arrullar de la libertad,
que tiene cogida pa ti y para mi en la goma de sus bragas.
Cuéntame del llover, de los días de mierda y cuchara,
de la rara podredumbre del querer, cuando no falta de nada
porque sé que el saber no sirvió para dañar tus labios,
y que te sobra todo lo que va después, de yo te quiero y yo, también.
Y mi costilla arrancada es nada, y cada trino quebrado es nada,
que fuimos solos y seremos nada#
Aguacero de soles caerá en nuestra cama,
que solo quiere amores de piernas mojadas.
Y dejarnos prender, que no es menester
ponernos en pie, tú como luna en celo y yo como una cabra.
Regaré, sin querer, con silencio, estrellas, tu cuarto,
que no anhela más que el grito del papel en el que he escrito mi quehacer,
que nunca más servirá de nada si su tronido se queda en nada
cuando su savia ya no riega nada
Un reguero de luna será nuestra casa,
de esta luna tan puta de pechos de plata.
Será el arrullar de la libertad,
que tiene cogida pa ti y para mi en la goma de sus bragas.
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