Nueva entrega de la saga de Piratas, una de las mas taquilleras de los últimos años y que parecía conocer su final tras la tercera parte y dejar la historia conclusa, pero Disney ha decidido retomar la saga dejando atrás a un par de personajes y manteniendo al rey de la función Jack Sparrow, de nuevo interpretado por Johnny Depp.
La saga en su tercera parte mostraba unos síntomas de agotamiento tremendos, aparte de que aquella película con tanta subtrama cansaba y mucho, quisieron hacerla tan grande que terminaron saturando al espectador.
Aquí la historia toma un nuevo comienzo aunque con viejos conocidos como Barbosa, de nuevo de lo mejor de la cinta Geoffrey Rush.
Pero hay nuevas incorporaciones como Penelope Cruz que aporta la tensión sexual con Sparrow en un papel que arranca bien pero que se termina diluyendo con el paso de los minutos.
La cinta no arranca mal, pero llega un momento que por mucha batalla que te muestren el ritmo te empieza a cansar, la historia de amor entre la sirena y el chico es bastante floja, no aporta nada.
El final llega sin sorpresas, se veía venir, o al menos yo lo intuí sin mucho merito por mi parte.
En resumen, tiene algún buen momento de humor protagonizados sobre todo por Sparrow, pero no logra mejorar el discreto sabor de boca que nos dejo la tercera parte.
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